Hoy es día de Reyes, un día mágico para niños y mayores.
Estás de estreno, has estrenado nuevo año, quizá esta mañana hayas recibido algún regalo que esperabas, quizá te has despertado con una sonrisa a tu lado, con un beso, con un abrazo, o quizá no. En cualquier caso, has estrenado un nuevo día y te mereces la mejor de tus versiones hoy y siempre.
Esa versión de ti mism@ que rebosa de alegría, de esperanza, de ilusión, de pasión, emociones todas ellas que te ayudarán a que este año sea un buen año para ti, un muy buen año para ti, pase lo que pase a tu alrededor.
Un día escuché que no podemos evitar que los pájaros de la tristeza sobrevuelen nuestras cabezas, pero si podemos evitar que aniden en nuestro cabello.
Durante este año, desde nuestro blog te vamos a ofrecer muchos regalos, te iremos dando pistas, ofreciendo herramientas, compartiendo historias, y acompañando para que tu mejor versión se levante contigo cada día.
Hoy queremos regalarte una historia sobre un hombre que contrató a un carpintero para reparar su granja. El primer día de trabajo fue desastroso. Se estropeó la sierra, se mojó la madera, y para colmo, su camioneta se negó a arrancar. En granjero entonces se ofreció a llevarle a casa. Al llegar, el carpintero le invitó a conocer a su familia, pero antes de entrar en casa, se detuvo frente a un árbol y tocó las puntas de las ramas con ambas manos. Al traspasar el umbral la cara del carpintero se iluminó. Feliz, besó a su mujer y a sus hijos y, tras las presentaciones, acompañó al granjero hasta su coche. El granjero entonces, no pudo evitar preguntarle qué había hecho en el árbol. Es mi árbol de los problemas dijo el carpintero. Sé que no puedo evitar tenerlos, pero también sé que mis problemas no pertenecen a mi casa, ni a mi familia. Así que los cuelgo en el árbol cada noche y los recojo por la mañana. Y añadió sonriendo: lo bueno es que al día siguiente no hay tantos como los que había colgado la noche anterior.
Busca tú también un símbolo que te ayude a tomar conciencia de todo lo que quieres que deje de hacerte sufrir o de preocuparte y úsalo cada día para descargarte y limpiarte de la basura acumulada en tu mente a lo largo del día. Te llevará muy poco tiempo y es muy eficaz.
Reconocer que no todos nuestros pensamientos son dignos de ser tenidos en cuenta y dejar de prestarles atención, aunque sea un rato cada día, te ayudará a sentirte más liger@ y a disfrutar de lo que tienes frente a ti.