El éxito en el resultado final de un proceso de coaching depende, principalmente, del propio cliente. Su nivel de implicación y compromiso es clave para crear las condiciones deseadas en la experiencia del autoconocimiento. ¿Cómo potenciar la participación activa durante el plan de acción?
1. Transforma el aprendizaje en acción
La verdadera dimensión del aprendizaje en el ámbito de la superación personal es práctica. Es decir, se orienta con el plano del hacer. En consecuencia, el espíritu de superación se materializa más allá de la reflexión teórica por medio de pasos que reducen la distancia con el objetivo que guía el proceso.
2. Sé sincero contigo mismo
La sinceridad es uno de los pilares que aporta sentido a un proceso de coaching. Por ello, se refleja en las respuestas y en la información que el cliente aporta a partir de las preguntas que realiza el profesional que acompaña el proceso. Sin embargo, la sinceridad es una luz que repercute directamente sobre uno mismo. Es decir, es un faro del diálogo interior y del mapa personal. Para no entorpecer o interferir negativamente en la evolución de un proceso de coaching, es esencial vivir el plan de acción de forma consciente. Un proceso de coaching transcurre en un contexto de calma, confianza y confidencialidad. En definitiva, el entorno te cuida, te protege y te nutre.
3. Profundiza en las bases del proceso si hay algo que no está claro
Deja de lado la prisa por completar los pasos que definen el plan de acción. Pueden darse muchas circunstancias en las que necesites profundizar en las bases del proceso antes de seguir dando pasos hacia adelante. Por ejemplo, quizá prefieras priorizar un objetivo diferente o resolver una contradicción interior. Los ritmos del proceso van más allá de plazos y fechas perfectamente marcadas en el calendario. El viaje es interior y, por tanto, tus emociones, tus valores y tus sensaciones también influyen en la experiencia.
4. Crea un espacio de calma antes y después de cada sesión
Para disfrutar plenamente del proceso de coaching, amplía el foco de atención más allá del marco en el que se desarrolla cada sesión. Es decir, crea un espacio de calma antes del próximo encuentro para llegar con puntualidad y tranquilidad a la hora prevista. Del mismo modo, intenta dejar un hueco libre en tu agenda después de finalizar la sesión para vivir con tranquilidad esos instantes que resultan tan significativos. Es decir, intenta no sumergirte de forma inmediata en el ritmo cotidiano. Deja que lo vivido durante la sesión repose y cale en tu existencia desde una perspectiva más profunda.
5. Dedícate el tiempo que mereces: vive el proceso como un regalo
Ten en cuenta que, una vez que has decidido iniciar un proceso de coaching, has creado las condiciones favorables para profundizar en tus objetivos, expectativas, preferencias y deseos personales. Es decir, convierte ese periodo de tiempo en un verdadero regalo en forma de crecimiento, transformación, sabiduría, atención consciente y tranquilidad.
Este puede ser un buen momento para reducir la distancia existente entre el escenario actual y el marco potencial que quieres alcanzar. Sin embargo, llegar hasta allí, o reducir la distancia que te aleja de ese horizonte, depende principalmente de ti. Evita cualquier excusa que te lleve a reducir tu propia responsabilidad en el proceso.
6. Actúa como protagonista directo del proceso
Iniciar un proceso de coaching no supone actuar como protagonista de forma directa a partir de ese momento. Lo realmente importante es que el cliente actúe con determinación desde la primera sesión. Es decir, es esencial que sea consciente de que los resultados del proceso van a depender, en gran medida, de su manera de actuar y de su disposición para potenciar la introspección de forma plena.
Recuerda algún momento previo de tu vida en el que, realmente, te has sentido el protagonista único e irrepetible de tu existencia. ¿Qué acciones de aquel entonces puedes recrear ahora en un contexto diferente? ¿Qué recursos, bienes y herramientas que te impulsaron en aquella etapa tal vez puedan ayudarte a avanzar ahora? ¿Qué es eso que evitas, pospones o aplazas a pesar de que, objetivamente, sabes que necesitas superar ese reto?
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