Hay momentos de nuestra vida en los que bien podemos sentir cierta insatisfacción y no sabemos a qué es debido, o bien deseamos tomar un rumbo diferente para el que no nos sentimos preparados.
Puede ocurrirnos también que incluso sabiendo perfectamente lo que queremos, no nos atrevamos a ir a por ello.
En Crearte sabemos que la magia es muy importante en todos estos casos, y que no hay nada como iniciar un viaje de autodescubrimiento para comenzar a desentrañar los pasos de ese camino que te lleva hacia donde realmente quieres estar. Esa magia es “la magia de saber hacerlo”.
Descubrir lo que quiero y saber con qué recursos cuento y cómo ponerlos en práctica, son las claves para conseguirlo. Esa es la razón de que muchas personas encuentren soluciones en el desarrollo personal y en concreto en el #Coachingdeverdad.
Porque más allá de una metodología de consecución de objetivos, que también es el coaching, el secreto de esta magia se encuentra a un nivel más profundo, está en la esencia del coaching, que nos llevará directamente a conectar con nuestra esencia individual.
Tres aspectos, mente, emociones y cuerpo, nos dan pistas sobre esa esencia nuestra, y ocuparnos de ellos de un modo equilibrado, es esencial para nuestro éxito personal y profesional.
La mayoría de las veces solo tenemos en cuenta uno de los elementos de esta triada a la hora de conocernos y de averiguar qué queremos. Nos fijamos en ocasiones en nuestra mente y vemos qué tipo de pensamientos tenemos y qué nos dicen estos acerca de nuestra situación, otras tenemos en cuenta qué sensaciones y emociones nos producen esos pensamientos o ciertas situaciones, y a veces tomamos como referencia nuestro cuerpo; mariposas en el estómago, ritmo de la respiración, etc. Aunque quizás éste sea aún el gran olvidado.
¿Imaginas cómo sería guiarnos por nuestra Esencia y tratar todos nuestros asuntos de acuerdo a lo que nos dicen nuestra mente, nuestras emociones y nuestra corporalidad?
Tomando conciencia de dónde estoy y de qué camino quiero emprender ¿qué pienso? ¿qué siento? ¿qué disposición toma mi cuerpo respecto a esto? Conectar con los bloqueos que me lo están impidiendo y con los recursos que tengo para poder trascenderlos.
Todo ello hace mucho más fácil asumir el compromiso con nuestros sueños y poder acompañarlos con toda la energía que nos aportan los pensamientos adecuados para emocionarnos persiguiendo nuestro deseo con todo el ímpetu de nuestro cuerpo.