fbpx

La práctica de la atención plena es un aprendizaje personal que puedes entrenar de manera consciente para integrar este hábito a partir de ahora en tu estilo de vida (o para afianzarlo todavía más). Durante el mes de marzo comienza un nuevo ciclo: la primavera. Una estación luminosa que puede llegar a convertirse en toda una metáfora de la transformación personal. Pues bien, la atención plena transforma la existencia de forma integral por una razón muy importante: aporta una nueva mirada desde la que es posible percibir matices sorprendentes. En Crearte Coaching profundizamos en los motivos por los que la práctica de la atención plena es muy positiva.

1. Crear un vínculo sólido con el presente

El ser humano puede establecer diferentes tipos de vínculos que van más allá del plano de las relaciones personales. Existen otras conexiones que son muy importantes. Por ejemplo, aquella que experimentas cuando te sientes profundamente conectado con el presente. Sin embargo, así como cuidas tus lazos afectivos por medio de hábitos y rutinas, la atención plena también puede ayudarte a cultivar la presencia consciente.

2. Concentración

¿Cuántas distracciones e interrupciones pueden interferir en tu nivel de atención en el día a día? La concentración no solo es relevante en el trabajo o en el estudio. Existen otros muchos aspectos que merecen tu implicación, por ejemplo, una conversación o la observación de un paisaje. Pues bien, la atención plena es un alimento de la concentración que, por otra parte, tiene su raíz en el presente.

3. Cultivar los pensamientos amables y positivos

La atención plena también puede tener su reflejo en el plano del pensamiento por medio de la práctica del optimismo y la amabilidad. ¿Quieres experimentar un mayor nivel de armonía interior? El encuentro con el ahora es un verdadero regalo que puedes concederte a ti mismo si escuchas tus necesidades y encuentras un espacio para estar contigo.

4. Aprender a priorizar lo más importante

En ocasiones, la conexión con el ahora parece difícil de alcanzar cuando la prisa se manifiesta a través de la urgencia o lo inmediato. Una complejidad que crece todavía más cuando la velocidad se convierte en un ingrediente que marca el ritmo de la realidad en el día a día. Es decir, cuando se transforma en un factor cotidiano. Sin embargo, es recomendable aprender a priorizar lo más importante. Y en la lista de aquellas cuestiones que resultan prioritarias, puedes añadir el autocuidado, el descanso y la conexión con el presente.

5. Prevención del estrés

Aunque es posible experimentar estrés en diferentes circunstancias, es aconsejable no normalizar sus síntomas. De este modo, la práctica frecuente y continuada de la atención plena ofrece un buen soporte para superar creencias limitantes, hacer cambios positivos en el estilo de vida y consolidar nuevos hábitos. En definitiva, hay diferentes medidas para afrontar los síntomas del estrés por medio de la prevención. Y la atención plena alimenta la armonía y la tranquilidad.

6. Dar valor al momento

La atención plena crea una conexión especial con el ahora. Es importante dar valor al momento en el plano personal, social, familiar o profesional. Pues bien, la práctica de la atención plena proporciona una mirada renovada de la realidad. No conduce a una visión idealizada de uno mismo o de los demás: clarifica numerosas cuestiones que se perciben con más nitidez desde la presencia consciente. Hay instantes que más allá de su sencillez aparente tienen una gran trascendencia.

7. Humildad

Existen diferentes maneras de posicionarse ante el día a día. La perspectiva de la humildad se aleja del ego o la vanidad. La atención plena puede ser clave para profundizar en cuestiones que requieren de un contexto diferente a aquel que se enmarca en el ritmo de la prisa o los resultados inmediatos. Por ejemplo, puede ayudarte a profundizar en tu propósito, en tus fortalezas personales, en tus aciertos y en tus relaciones personales. Y también es un medio para avanzar en otros ámbitos como el perdón, la resolución de conflictos, la expresión de emociones incómodas, la frustración…

La práctica de la atención plena y el valor de la presencia consciente están muy integrados en la próxima edición del curso MBSR que comienza en abril. Si quieres adentrarte en este programa de Reducción del Estrés basado en Mindfulness, todavía puedes acceder a las últimas plazas. El curso se va a desarrollar entre los meses de abril y junio en modalidad online (por medio de clases en tiempo real). Un proceso de formación que ofrece recursos y herramientas para potenciar la serenidad, gestionar la incertidumbre, cultivar la resiliencia y vivir el presente.

 

1 estrella2 estrellas3 estrellas4 estrellas5 estrellas (2 votos, promedio: 5,00 de 5)
Cargando...