La escritura no solo puede integrarse en un contexto creativo, sino también emocional. La belleza de la palabra es utilizada con maestría por poetas, filósofos y autores que dejaron su huella en la historia. Sin embargo, más allá del enfoque artístico, cultural o humanista, cualquier persona, desde su propia posición, puede dar voz a sus emociones sobre el papel. En el blog de Crearte Coaching te proponemos siete ejercicios de escritura para profundizar en tus emociones.
1. Utiliza metáforas y símbolos para describir el paisaje interior
Las metáforas y los símbolos tienen un importante significado. Son recursos que pueden ayudarte a poner palabras a emociones, sensaciones y sentimientos que se integran en tu mundo interior. El propio paisaje natural se convierte en una fuente inagotable de inspiración a través de imágenes, metáforas y símbolos que pueden enriquecer la escritura de un texto autobiográfico.
2. Cultiva el hábito de la gratitud y escribe un diario
La práctica de la gratitud es una experiencia que potencia una importante transformación a nivel interno. Es un proceso que alimenta la mirada a través del contacto con el presente y el descubrimiento de la belleza. El ejercicio de escribir tres, cuatro o cinco motivos para dar las gracias, puedes ampliar la lista con más elementos, proporciona un valioso aprendizaje. La gratitud consciente es clave para poner en valor esos regalos y bienes existenciales que pueden relativizarse o darse por supuestos cuando se analizan desde el ego.
3. Redacta una carta con algún mensaje pendiente
El peso de las palabras que nunca se pronunciaron puede llegar a transformarse en un nudo que pesa en el ánimo. ¿Y cómo desenredar ese nudo que se enquista todavía más a través del silencio constante? Nunca es tarde para expresar un mensaje importante, incluso cuando no es posible establecer un contacto directo con el destinatario de esas palabras. La intimidad de una carta te ofrece el contexto y el espacio necesario para dar voz a esas emociones que te gustaría exteriorizar. La carta se convierte en una metáfora del encuentro sincero con otra persona, pero también contigo mismo.
4. Crea un final alternativo para un capítulo concreto de tu vida
A veces, estamos muy familiarizados con ese relato que nos hemos contado a nosotros mismos en torno a una experiencia determinada. La escritura creativa y emocional permite explorar alternativas que ya no son viables en la realidad. Por ejemplo, no se puede reescribir un asunto del pasado de forma literal, pero el papel sí aporta una nueva dimensión a lo vivido a través de la reflexión. Escribe un final alternativo y diferente para una situación sencilla que, por alguna razón, recuerdas con frecuencia en tu presente.
5. Elabora tu receta para cultivar la alegría y la serenidad en el presente
La búsqueda de la felicidad en su sentido más profundo es una constante en la existencia humana. A veces, tendemos a buscar fórmulas que, al más puro estilo de un manual de instrucciones, especifiquen cuáles son las claves esenciales para lograr la plenitud en el plano personal o profesional. Sin embargo, no existe un único camino para avanzar en esa dirección. Te proponemos que escribas tu propia receta para cultivar la alegría y la serenidad en el ahora a partir de los recursos, posibilidades y opciones que tienes a tu alcance.
6. Escribe una gran historia: tú eres el protagonista de tu diario
Más allá del ritmo de las ocupaciones, es importante encontrar un espacio para detener el paso y descansar. La escritura de tu diario puede ayudarte a conectar con el rol que mereces ocupar en tu presente: eres protagonista de una aventura en constante transformación. Desarrolla tu creatividad a través de la escritura autobiográfica que pone el acento en vivencias, hechos, relaciones personales, sentimientos y emociones.
7. Lluvia de ideas: diferentes alternativas para lograr un objetivo
Expande tu horizonte de realidad a través de un mapa que contempla diferentes alternativas para conseguir un objetivo viable. Esa meta que te ilusiona, te motiva y te entusiasma. Si lo prefieres, también puedes orientar el proceso de escritura hacia un reto que te despierta otras emociones diferentes. A veces, podemos observar un contexto de forma lineal, pero la escritura genera nuevos caminos en el alma y en la corazón. No solo puedes utilizar el recurso de la palabra para expresar lo que sientes. También puedes enriquecer el proceso con el lenguaje de la imagen y el dibujo.
Te recordamos que en Crearte Coaching damos la bienvenida al mes de noviembre con la nueva edición de un curso aprobado por ICF: Curso Especialista en Inteligencia Emocional.
¡Ojalá que la magia de la escritura y la lectura te acompañen incluso en los momentos más complejos!