El sector del emprendimiento está vinculado con la iniciativa de arriesgar por una idea de negocio. En ocasiones, el emprendedor siente que su tarea, más allá de estimulante, también puede resultar muy solitaria.
Además de la formación continua, el coaching es una herramienta de empoderamiento para gestionar un negocio. Para que el proceso sea realmente efectivo, es fundamental que el emprendedor tenga una implicación real en su experiencia de autoconocimiento. ¿En qué objetivos de emprendimiento puede ayudar un proceso de coaching?
1. La gestión del tiempo puede ser el punto débil de muchos profesionales que, ante la dificultad por organizar una agenda interminable, pueden prolongar la jornada de trabajo en casa o también, vivir con el estrés crónico de estar inmerso en una contrarreloj. Sin duda, un proceso de coaching puede ser vital para un emprendedor que quiere identificar cuáles son sus ladrones de tiempo.
2. La conciliación puede llegar a ser uno de los grandes retos para muchos emprendedores que tienen horarios complejos, trabajan en fin de semana o trabajan y estudian al mismo tiempo. Sin duda, es muy importante establecer una armonía entre las distintas esferas de la vida. Esto supone tomar decisiones, hacer cambios y pensar desde la perspectiva de la totalidad.
3. El miedo es uno de los puntos de bloqueo que incluso puede frenar a muchas personas con talento y vocación emprendedora antes de dar el paso. Sin duda, pasar de la teoría a la práctica de un proyecto puede producir cierto vértigo. Por esta razón, un proceso de coaching, es una buena preparación previa hacia el éxito.
4. El estrés puede estar vinculado con distintos aspectos. También con el plano económico. Por esta razón, para poner las finanzas en orden, es útil hacer un proceso de coaching financiero. Los emprendedores se relacionan con números constantemente: hacer facturas, elaborar inventario, preparar un presupuesto… Tomar decisiones respecto de la gestión del plano económico es vital para afianzar la estructura de un proyecto.
5. La comunicación es una de las claves del éxito potencial de un emprendedor que, desde el mismo instante en el que decide montar un negocio, inicia un marketing esencial. Por ejemplo, mejorar las habilidades para hablar en público es vital para ganar autoconfianza en las reuniones de trabajo, realización de conferencias, asistencia a eventos, llegar a acuerdos con proveedores, trabajar en equipo, conseguir inversionistas que apoyen el proyecto… A través de un proceso de coaching es posible elaborar un plan de acción con el que superar el miedo a hablar en público.
6. A veces, la motivación muere, el emprendedor pierde la perspectiva inicial que dio lugar a una pasión profesional. Un proceso de coaching puede ser un punto de inspiración para conectar nuevamente con esa visión.
7. En un negocio también surgen dificultades. Por ejemplo, el emprendedor puede tener problemas de relación con el socio, tener distintas perspectivas sobre la idea de negocio. ¿Qué hacer en ese caso? En un proceso de coaching, es posible encontrar una respuesta personal propia.
8. Un emprendedor puede ser jefe pero no ser líder. Sin embargo, es fundamental que un profesional desarrolle el liderazgo necesario para gestionar un equipo con actitud positiva. Un proceso de coaching puede ser también eficaz para corregir posibles errores, por ejemplo, un estilo de liderazgo paternalista que impide desarrollarse a los subordinados.
9. Desde mi punto de vista, uno de los principales beneficios que el coaching ofrece a los emprendedores es la posibilidad de desarrollar nuevos recursos de gestión emocional y PNL. Sin duda, las emociones forman parte de la vida de un negocio. El emprendedor debe aspirar a vivir todo lo relativo a su negocio, como una experiencia agradable de superación en lugar de como una carga. Sin duda, un proceso puede ser una decisión de inteligencia emocional para superar el bloqueo emocional.
10. Un proceso de coaching también puede ser una herramienta de apoyo para fomentar el networking e incluso, contactar con un business angel a quien presentar la idea de negocio.
En Crearte, escuela de coaching, creemos en el talento emprendedor como un bien social. Cree en ti mismo, analiza tu idea, estudia el público objetivo, elabora un plan de negocio y rodeáte de profesionales expertos. Si desde hace un tiempo late en ti la idea de montar un proyecto, un proceso de coaching puede ayudarte a pensar en ello con tranquilidad para tomar una decisión definitiva.